En Holanda hay un montón de actividades para los más peques: parques de atracciones, jardines impresionantes, ciudades en miniatura…
Hoy recomendamos los lugares más interesantes y divertidos para los más peques (y no tan peques):
1. Parques de atracciones
A la hora de planear un viaje con niños el primer objetivo es que se diviertan y que aprendan. Conocer culturas nuevas de una manera divertida hará que vuelvan a casa cansados de pasárselo en grande.
- Parque Madurodam: Es una ciudad en miniatura que se encuentra en La Haya. Están representados a pequeñas escala los edificios más emblemáticos, las casas típicas, los canales y los campos de flores. Recientemente lo han renovado y ahora es más interactivo. Una visita imprescindible si estás cerca de La Haya.
- Efteling: Es el parque de atracciones más importante del país. Está ambientado en el mundo encantado: hadas, gnomos, brujas, dragones y cuentos populares. Es un lugar mágico donde los árboles cuentan cuentos, hay teatros musicales, espectáculos de agua luz y fuego… Un planazo en toda regla para toda la familia.
- Duinrell: Una zona de juegos gigantesca con una variedad asombrosa de juegos e instalaciones. Allí no encontrarás los clásicos juegos, sino que hay cuerdas para trepar, castillos en los que poder subir y otros. También hay una piscina cubierta con los toboganes acuáticos más grande de Holanda. .
2. Ruta en bici
Holanda es un país de cuento lleno de casitas hermosas, canales, barquitos, bicicletas, granjas educativas, campos de tulipanes… Un destino repleto de plazas, parques y restaurantes pensados para ellos.
Una de las actividades aptas para (casi) todo tipo de edades es el alquiler de una bici. Tanto para los más peques (pueden ir en una caja adjunta a la bici del adulto) como para los más mayores, el paseo a dos ruedas les encantará. ¿Te imaginas con los peques de la casa recorriendo un país de cuento? Y no te preocupes, hay carriles bici por todas partes y es un placer conducirlas, ya que ¡no hay cuestas!
3. Museos
El país de los canales está repleto de museos dirigidos a los más pequeños para que nunca se aburran. Algunos de los que más nos gustan son:
- Museo de ciencias Nemo: Es el centro científico más grande de Holanda. Un espacio para que los mayores y los pequeños se diviertan experimentando, jugando y descubriendo. Tiene cinco plantas y la dificultad va aumentando a la vez que su altura.
- Museo del Ferrocarril: ¡Trenes, trenes y más trenes! Este museo está dedicado a aquellos enamorados de las locomotoras. Muy interactivo y está repleto de exposiciones y atracciones.
- Micropia: ¿Has oído hablar alguna vez de este museo? ¡Es el primero del mundo dedicado a los microorganismos! Es un lugar muy muy interesante para que los peques descubran el mundo de los microbios.
¿Que os han parecido estas recomendaciones? Y para los que hayáis quedado hasta aquí tenéis una sorpresita no apta para todos los públicos: La Mazmorra de Ámsterdam. Se trata de uno de los espectáculos más terroríficos de Holanda. Una lección inolvidable sobre la historia oscura de Ámstedam, para toda la familia. Son unos espectáculos en vivo impresionantes interpretados por siete actorazos. ¿Sobrevivirás a la aventura?